PERIODISMO DE INVESTIGACIÓN
OBSERVATORIO DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES
Entrevistamos a profesionales del observatorio de Derecho de la Ciudad de Buenos Aires para conocer las leyes y normativas que no están cumpliéndose, entre ellos Jhonatan Baldiviezo, presidente del Observatorio del Derecho a la Ciudad y abogado en Derechos Humanos, Ambientales y Urbanos; y la ingeniera Eva Koutsovitis, del Observatorio del Derecho a la Ciudad y coordinadora de la cátedra de Ingeniería Comunitaria de la UBA.
¿Por qué el barrio “La carbonilla” aún no se encuentra urbanizado?
Jhonatan: La falta de urbanización del barrio es meramente por falta de voluntad política. Existen 4 leyes que establecen que el barrio debe ser urbanizado y que incluso no debe estar en las condiciones en las que está, porque es uno de los barrios que menos recursos necesita para ser urbanizado. No es necesario que se apruebe el proyecto de ley para que el gobierno tenga la obligación de urbanizar el barrio.
¿Qué leyes están incumpliéndose?
Jhonatan: El mandato de urbanizar el barrio surge del Articulo 31 de la Constitución de la ciudad y de la Ley N°148 que implica que se deben urbanizar todos los barrios de la ciudad. También está el código urbanístico que en su capítulo 8 ordena avanzar con la integración social y urbana de las villas. El año pasado se votó a nivel nacional la Ley n° 27.453, que es la Ley Nacional de Barrios Populares que establece la integración socio urbana de los Barrios Populares identificados en el Registro Nacional de Barrios Populares en Proceso de Integración Urbana (RENABAP) creado por decreto 358/2017. El barrio “La Carbonilla” se encuentra inscripto en aquel registro. Con esto, hay una mayor obligación del gobierno nacional y de la ciudad de avanzar cuanto antes, porque los terrenos ya son nacionales y no es necesario que los expropien. Aparte esta la ley del agua 3295 que garantiza el acceso al agua potable a cada habitante de la ciudad por ser el agua un derecho humano, por lo que la acción del camión de Ugis tampoco salda esta necesidad porque los camiones cisterna no poseen agua segura. El agua debe ser de red con presión adecuada.
¿Cómo se solucionaría la situación de los vecinos del barrio?
Jhonatan: El problema se solucionará solo si se urbaniza, porque las concesionarias entran solo a calles perimetrales y si se urbaniza podrían entrar y de hecho estarían obligadas a entrar porque sería una vía pública. Hasta que no se urbanice dentro del barrio el gobierno hará obras de parche, como lo de UGIS que no solucionan el problema de fondo.
Además de afectar a los vecinos ¿La construcción del viaducto afecta al medio ambiente?
Jhonatan: Sí, existe una ley que obliga a las empresas a hacer el estudio de impacto ambiental. Es la ley 123, pero no sabemos si la empresa lo que hizo fue tomar el estudio que se había hecho previamente para la construcción de las vías.
¿Los vecinos pudieron asistir a una audiencia pública?
Jhonatan: Con respecto a la audiencia pública, muchas veces se inicia la obra sin hacerla, dependiendo de si la cataloguen como simple o compleja, en el primer caso no se hace, y en el segundo sí. Pero no se la realiza automáticamente una vez que inicia una obra. Esto habría que averiguarlo con la empresa que realiza el viaducto y con el Apra (Agencia de Protección Ambiental)
¿Cómo funciona el sistema de agua en los barrios populares?
Eva: El agua que se consume en los barrios populares, que concentran el 15% de los habitantes de la ciudad y no acceden a servicios básicos formales, no es controlada por ningún organismo estatal, por lo que no es agua potable. Hay distintas modalidades en el abastecimiento informal de agua para consumo en los barrios populares, una de las alternativas es la entrega mediante camiones cisterna, que no es agua potable segura, porque el agua potable es la que vos distribuís mediante un sistema presurizado con determinados niveles de presión que te garantizan la calidad del agua. Otra opción es la entrega de agua en sachet, que es potable, pero es un mecanismo precario de acceso. Las leyes de la ciudad establecen que hay que brindar el agua en cantidad en calidad para todos los usos, para todos los habitantes.
¿Cuál es el problema que posee el agua en “La Carbonilla”?
Eva: Carbonilla está atravesando un problema crítico en relación al agua potable. Nosotros hicimos un relevamiento en el barrio en donde pudimos constatar que en muchos sectores no había agua, y que la entrega del camión cisterna era insuficiente y que en los sectores donde había agua, las presiones eran muy bajas, lo que pone el riesgo la calidad del agua.
¿Qué rol ocupa la empresa Aysa en esta problemática?
Eva: Aysa tiene la responsabilidad de la prestación en toda la Ciudad de Buenos Aires, si bien los barrios populares de la ciudad se encuentran dentro del área de concesión de la empresa prestadora, en los hechos ésta únicamente presta el servicio público de distribución de agua potable y saneamiento hasta las periferias de los mismos, dentro de ellos los vecinos mediante autogestión han ido conformando sistemas informales de distribución de agua y de saneamiento cloacal.
Aysa plantea que su marco regulatorio determina que los usuarios son todos aquellos frentistas a las vías públicas, y la realidad es que hace una año y medio se flexibilizó el marco regulatorio, incorporándose la resolución 26 del Apra, que establece que Aysa puede prestar el servicio a todos los frentistas a vías públicas formales e informales siempre y cuando la vía publica tenga 4 metros de ancho y doble acceso. Por lo tanto, hoy Aysa estaría en condiciones en muchos sectores del barrio de formalizar la prestación del servicio, pero para esto el gobierno de la ciudad debe convenir con la empresa Aysa las condiciones para formalizar la prestación de servicio. Lo que uno observa es que la problemática se va peloteando de un organismo a otro. Hay muchos organismos que intervienen, pero el problema no se resuelve.
¿Aysa debería brindar servicio a los vecinos de La Carbonilla?
Eva: Hay muchas leyes incumplidas locales y nacionales, y debido a la resolución 26 del Apra, Aysa estaría en condiciones de prestar el servicio en muchos sectores del barrio lo que se requiere es la definición política de Aysa y del gobierno de la ciudad para celebrar un convenio para formalizar la prestación del servicio. No hay ningún impedimento normativo para que Aysa formalice la prestación del servicio en el barrio. Hay una falta de decisión política por parte de la empresa prestadora y por parte el gobierno de la ciudad de celebrar el convenio para formalizar la prestación de servicio.
¿El problema del agua en los barrios populares mejoró o empeoró con los años?
Eva: La Ciudad de Buenos Aires es una de las pocas capitales que, en lugar de mejorar en la cobertura de agua y saneamiento, retrocede. Si uno mira los datos del 2001, había 107 mil personas viviendo en las villas, ya hoy estimamos que el número se cuadriplicó o sea que hay 400 mil personas. Del 2001 a la fecha se ha retrocedido en la cobertura y ese retroceso indica que si en el 2001 había aproximadamente un 3% de la población sin agua hoy tenemos un 15%, lo cual da cuenta del fracaso de las políticas públicas.